EVASIÓN TV: FLY RUNNING LA MOLINA

El pasado 16 de octubre, en la estación de La Molina, arrancó la primera edición del circuito Fly Running. Qué es? Una absoluta locura!

La competición estaba compuesta por dos descensos: Una crono individual y la avalanche.

Tras la entrega de dorsales y el briefing los participantes ascendieron con el Telecabina hasta el punto de inicio, una imagen poco frecuente en el mundo del trailrunning…

A las 10:30h arrancó la primera manga de la Fly Running La Molina, la crono individual, en la que los corredores salían uno por uno en intervalos de medio minuto.

Cada corredor tenía que completar una distancia de 3 kilómetros y 900 metros con un desnivel negativo de 720 metros. Partía desde la zona de la Tossa d’Alp, a 2.536 metros de altitud, hasta llegar corriendo, y casi volando, hasta el lago de La Molina. Todo era bajada, des del principio hasta el final.

El primer tramo descendía por un terreno virgen, muy vertical, con mucha piedra y sin ningún tipo de sendero donde pisar con seguridad. Aún así, los participantes bajaban a velocidades inverosímiles.

El segundo tramo, que transcurría por un sendero del bike park de La Molina, era más cómodo a nivel de pisada, pero con muchos baches que los atletas tuvieron que sortear a gran velocidad, creando a muchos de ellos, serios problemas.

Y el tramo final antes de llegar a meta, el recorrido se adentraba en un espeso bosque donde los atletas, con las piernas ya muy castigadas, tuvieron que descender por un terreno húmedo y resbaladizo, esquivando árboles y ramas, saltar rocas y sortear troncos, todo esto sin perder de vista un trazado muy sinuoso.

Un descenso realmente completo y muy auténtico.

Los corredores y corredoras demostraron, en la crono individual, su técnica y su destreza, marcando puntas de velocidad de hasta 2 minutos y 16 segundos por kilómetro.


A las 13h todos los participantes volverían a estar de nuevo en el punto de lanzamiento listos para una salida en masa, por cajones, espectacular, en la avalanche.

Biel Ràfols, amante del descenso, se colocó rápidamente en cabeza y lideró la avalanche des del principio, hasta abrir un hueco considerable para lograr ser el más veloz cruzando la meta del lago en un tiempo estratosférico de sólo 12 minutos y 50 segundos.

En categoría femenina, Marta Palau, fue la gran vencedora de la jornada.

La Molina ha sido el escenario escogido para celebrar esta primera prueba de Fly Running que se ha convertido en una auténtica fiesta del descenso.

Y es sólo el primer paso, el aperitivo de lo que llegará el año que viene: las Fly Running Series 2017 que tendrán parada en La Molina y en la Vall de Núria y se cerrarán con una prueba de exhibición en una montaña mágica del país, que en 2017 será el Pedraforca.